
Elfos
Las ideas actuales sobre los elfos se dividen en dos ramas. En una de ellas, los elfos son criaturas pequeñas con forma humana, generalmente semejantes a hombrecitos con gorros puntiagudos, que emplean sus habilidades mágicas para fabricar cosas maravillosas, desde deliciosas galletas a juguetes en el taller que Papá Noel tiene en el polo norte. En la otra rama, que surge de la descripción que de ellos hace J.R.R. Tolkien en El señor de los anillos, son considerados seres caritativos y poderosos de tamaño humano, pero más bellos y nobles que los hombres. Longevos y eternamente jóvenes, los elfos de Tolkien utilizan sus considerables poderes para luchar contra las fuerzas de la naturaleza. Si bien estos elfos son una creación literaria única, se basan en aspectos del folclore tradicional de Gran Bretaña y el norte europeo.

Alfar
Los elfos de la mitología nórdica son conocidos como alfar, y se dividen en dos razas: los elfos de la luz y los elfos de la oscuridad.
Los primeros, también llamados liosalfar, son seres radiantes y hermosos de dimensiones humanas, que "brillan más que el Sol" según los Eddas nórdicos del siglo XIII. Habitan un reino luminoso llamado Alfheim, situado entre el cielo y la tierra, y siempre son benévolos con los humanos, como los ángeles. Algunos héroes se convertían en elfos de la luz después de su muerte, y también eran posibles los matrimonios entre esta clase de seres y las mujeres mortales. Se decía que los hijos nacidos de este tipo de uniones eran más bellos que los humanos porque por sus venas corría sangre de elfo.
Los elfos de la oscuridad o döckalfar son descritos en los Eddas como seres completamente diferentes de los elfos de la luz, tanto en apariencia como en comportamiento. Considerados "más oscuros que la brea", lso elfos viven en reinos enterrados a gran profundidad, donde emplean sus poderes mágicos para fabricar espadas y objetos encantados a partir de una serie de metales. Los elfos de la oscuridad son siniestros y poderosos, aunque en la Suecia medieval eran honrados con ofrendas porque se los creía portadores de fertilidad y capaces de fortalecer la fuerza vital de la familia vinculándola con sus ancestros.

Los elfos en el folclore europeo
En todas las culturas europeas hemos encontrado la presencia de elfos, aunque bajo distintos aspectos y con nombres diversos. Algunos elfos eran considerados benévolos y otros, unas criaturas bastante desagradables.
Elfos británicos
Tanto en la tradición inglesa como escocesa, los elfos son seres sobrenaturales de dimensiones humanas que suelen hacer daño a los humanos que se cruzan en su camino. Numerosas baladas describen Elphame, hogar de los elfos, como un lugar fantasmagórico y aterrador. En Escocia, las puntas de flecha prehistóricas son conocidas como elf-shot ("disparo de los elfos") porque se cree qeu eran utilizadas por criaturas malignas para herir al ganado. Los elfos también atormentan a las personas mientras duermen, enredándoles el pelo hasta formar numerosos nudos.
También se creía que los elfos robaban niños, como las hadas. Para evitar este peligro, los pueblos de la costa oriental de Escocia cortaban ramas de hiedra y roble en una noche de luna creciente de marzo y con ellas confeccionaban una corona. A continuación pasaban a los niños tres veces por este aro y de esa manera los protegían.

Spaewives (adivinas)
En el folclore de Islandia, los homólogos femeninos de los elfos son las spaewives, criaturas parecidas a diminutas campesinas, tan pequeñas como un dedo humano. Estos seres construyen sus hogares en las tumbas y los montículos sagrados de antiguas necrópolis, y son expertos en curaciones mágicas y en el conocimiento de las hierbas. Dotadas del poder de la adivinación -la palabra spae significa "profecía" en nórdico antiguo-, las spaewives son capaces de predecir el futuro leyendo hojas de té e interpretando runas y augurios naturales.
Elles
Conocidas como elles en Dinamarca, las mujeres elfos tienen tamaño humano, largo pelo rubio y una espalda completamente hueca. Entre sus aficiones figuran el canto y la ejecución de la lira, en la que son tan expertas que los jóvenes cazadores suelen caer presa de sus encantos. Pero también existen hombres elles, que son más bajos que las mujeres. De hecho, parecen hombrecitos barbudos que lucen sombreros oscuros y ajustados. Los elles en general (hombres y mujeres) viven en montículos erigidos en los páramos azotados por el viento. Son peligrosos para la humanidad porque pueden convertir su aliento en una niebla de enfermedad y echarlo sobre cualquier persona que se acerque demasiado a su morada.
Duendes
Los elfos del folclore español reciben el nombre de duendes. Los femeninos parecen pequeñas mujeres de mediana edad con dedos largos, que visten de verde, rojo y gris. Los masculinos usan sombreros cónicos sin ala, capuchas oscuras o gorras rojas.
Por la noche, los duendes emergen de las paredes encaladas de las casas pueblerinas y hasta el amanecer se dedican a limpiar, reparar o trabajar como herreros. Los duendes malvados también pueden romper objetos, desordenar las cosas y provocar pesadillas al a familia humana cuya casa habitan.
